Crónica festival Mingatrón 2010 (30 abril)

Antes de comenzar la crónica quisiera comentar un par de cosas. Lo primero es que quiero pedir disculpas a las bandas y a los organizadores del festival que fueron entrevistados. La razón es que por un error mío se han perdido los audios de las entrevistas por completo. Resulta muy frustrante conseguir tan interesantes documentos para luego perderlos. Especialmente por el tiempo que me dedicaron con enorme amabilidad todos y cada uno de los entrevistados. Así pues, como nadie se presta para colaborar en mi crucifixión, tendremos que buscar otra fórmula para deshacer el lío.

Lo segundo es agradecer a la organización su fantástico trato para con nosotros y la absoluta cortesía y simpatía que nos brindaron. ¡Sois los mejores!

Bien, entremos en materia...

Poco antes de las nueve de la noche subían los organizadores al escenario mientras sonaban los compases de Mazinger Metal de Gigatrón. Así daban la bienvenida a los que hasta allí nos habíamos acercado. Tras el ya célebre ritual del calimocho y unas palabras de agradecimiento, subían al escenario los primeros de la noche, VAUDAN.

Difícil papeleta tenían los sevillanos, ya que ser los primeros supone encontrarte con un aún escaso público (nunca he entendido por qué siempre la gente se queda en la puerta aunque hayan empezado las actuaciones). A pesar de la circunstancia de tener que calentar el ambiente, tuvieron un inicio frenético y descargaron con gran soltura y personalidad. Obviamente, sufrieron un mal sonido de inicio (la propia acústica de la sala no ayuda en esto tampoco), especialmente Xavier a la voz, al cual casi no se le oía. Poco a poco fueron desapareciendo esos problemas y se pudo apreciar mejor la música que ejecutaron. Tuvieron tiempo también de marcarse una versión de Ace of Spades de Motörhead, que sonó como una apisonadora. Resaltar el bonito detalle que tuvieron para cerrar su actuación, que fue lanzar desde el escenario algunas camisetas con el logo de la banda. Chapeau, señores.

En el poco tiempo que tuvieron para tocar nos deleitaron con una original combinación de estilos, que al fin y al cabo, ellos mismos definen como "puto Heavy Metal". Gran concierto.

Rápidamente se procedió al cambio de set para la descarga de ANIMA ADVERSA, una banda por la cual tenía mucha curiosidad, ya que en estudio sorprenden muchísimo por su savoir faire a pesar de la joven edad de sus componentes. Su estilo recuerda (y digo sólo "recuerda") a bandas como Saurom o Mägo de Oz en otras épocas, aunque su corte freak y canallesco tiene personalidad propia. Su música invitaba a saltar y corear los temas, los cuales resultan muy pegadizos desde la primera escucha. Y así fue, pues enseguida se apretaron las primeras filas para bailar y celebrar lo que ya era una fiesta. Un gran directo que se hace corto.

Hablábamos en el backstage de sus planes y recibíamos con gran alegría la noticia de contactos que han tenido para tocar en países como Perú, Finlandia o Polonia. Sin embargo, trabajo y universidad suponen un handicap a la hora de aventurarse de tal forma. Veremos qué les depara el futuro a estos jóvenes músicos de Granada y Jaén. De momento a patear territorio patrio.

Tras otro cambio de récord, subió al escenario la banda que parecía contar con más seguidores entre el respetable, NOCHETERNA. Un grupo que gracias a su particular mezcla de influencias, ofrece un tremendo cóctel sonoro, dirigido además por la potentísima voz de su vocalista. Gran base rítmica, guitarras afiladas y combinando con unos teclados que proporcionaron una perfecta atmósfera (también las cantidades industriales de humo, que por momentos cubrían todo el escenario). Hay que decir que tienen un sonido muy actual que hace que el personal no pare de mover la cabeza en todo momento.

Un medley de Metallica fue el broche de una gran actuación y una gran puesta en escena. Grata sorpresa también los sevillanos.

Antes de salir a escena KATIE KING, hubo que cantar el cumpleaños feliz al presidente de la Asociación Mingatrón y organizador del festival, algo que nos hizo darnos cuenta del por qué la insistencia en celebrarlo el 30 de Abril, hahaha...

Enseguida subieron los renovados Katie King. Una banda que ha sufrido un cambio de formación brutal, del que sólo ha quedado el gran Miguel Gullón. Aún así, hay que decir que la banda no sólo no se ve afectada, sino que parece enriquecida con las nuevas incorporaciones. Es cierto que se echa de menos a Paco Battery, Manu y Larry, pero tanto el nivel de los nuevos integrantes como su experiencia es impresionante y eso da solidez a la banda. Dos grandísimos guitarristas (increíbles solos de guitarra), como son Ángel Berlanga y la reciente incorporación, el onubense Víctor Delgado; el demoledor Fernando Gallardo y el excepcional vocalista, también de recientísima incorporación, David García, componen el nuevo combo. Señalar que el hecho de tener un vocalista con guitarra, a pesar del carisma de Larry, limitaba un poco la puesta en escena, cosa que ahora no ocurre ahora con David, que no paró de moverse, de arengar e interactuar con el público y sus compañeros.

En cuanto a lo musical, el repertorio combinó un poco de todo, temas de su último disco Ex Novo, pero sin olvidar los clásicos de la banda que ahora suenan más frescos, debido a los cambios. Habré visto a este grupo como quinientas veces y nunca se cansa uno de verlos tocar. Y es que, como siempre, Katie King es garantía de espectáculo y calidad sobre las tablas.

Cerraban la noche el trío LOS MONSTRUITOS, un acertado fin de fiesta. Un grupo que apuesta por el surrealismo absoluto y el buen humor en sus composiciones. Evidentemente, no estás viendo un grupo de Metal, pero sin duda te sacan la sonrisa. Se nota el trabajo, a pesar de su apuesta más desenfadada, ya que tienen tres álbumes y cantidad de videoclips con mucha imaginación. Un rato divertido como guinda del pastel.

Una pena la menor asistencia que otros años debido, al parecer, por la falta este año de barra libre de calimocho... Hay que tener la cara dura. Sin embargo, aquellos que asistieron disfrutaron de enormes bandas que sorprendieron a propios y extraños. Todo un acierto el cartel.
Me comentaban al principio los organizadores, la intención de celebrarlo al aire libre para el próximo año e ir aumentando la dimensión del festival. ¡Nos vemos pues en el Mingatrón 2011!

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